Energía Escalar o Cuántica

El descubrimiento científico más grande en la historia del mundo que ha sucedido en las últimas décadas y que ha pasado casi desapercibido debido al gran secreto con que se ha guardado por la mayoría de quienes saben de ello, es el descubrimiento de un tipo totalmente nuevo de  ondas  electromagnéticas, que sólo existen en el vacío del espacio, el espacio vacío entre  los átomos de nuestro cuerpo, así como en todos los átomos de todo lo que llamamos “materia”

Estas ondas constituyen una especie de océano de energía infinita, y ahora se ha descubierto que esta energía abundante puede ser canalizada, para ser utilizada para optimizar cualquier sustancia o tejido, equilibrando y modificando su estructura molecular desde el nivel subatómico , e incluso para curar el cuerpo de cualquier enfermedad, ya sea física o emocional.. Este es el nuevo mundo del electromagnetismo escalar, la energía de punto cero, la energía de la nada absoluta que existía aun antes de que el mundo fuera mundo.

Este descubrimiento asombroso es atribuido  al científico irlandés James Clark Maxwell,  un escocés que nació en el siglo 19. Maxwell era un genio matemático cuyo trabajo llevó al desarrollo de la física cuántica. Albert Einstein trabajó en los resultados de Maxwell y descubrió "La Teoría de la Relatividad".

Sin embargo, tuvieron que transcurrir otros cincuenta años después del descubrimiento de Maxwell para probar la existencia de la Energía Escalar. hasta que Nikola Tesla, quien nació en Yugoslavia en 1857, pudo demostrar la existencia de este forma de energía. Tesla, generalmente considerado el padre del electromagnetismo escalar, también llamada "energía escalar" o "punto cero" de la energía, se refiere a ella como "energía radiante" o como la ola universal. Albert Einstein reconoció la existencia de esta forma de energía e hizo referencia, en sus estudios en la década de 1920.

Posteriormente estudiado por el científico estadounidense Tom Barden Cheniere, este descubrimiento de la energía de punto cero, es de hecho y sin duda, el descubrimiento más grande en la historia humana, ya que cambiará totalmente nuestra comprensión y percepción de la física y de lo "no físico" , la realidad.

A través de electromagnetismo escalar es posible  ya la ingeniería molecular,  la creación de nuevos "imposibles" e incluso la transmutación de elementos. Ello permite la cura del cáncer y el sida entre muchas otras enfermedades, de hecho, casi cualquier enfermedad, lo que ha sido posible  ya y a muy bajo costo. Todo el mundo puede ser saludable y mantenerse asi.

Para la humanidad en su actual coyuntura, un tema es de vital importancia, lograr la salud plena y absoluta, tanto en el plano emocional como en el físico, y es precisamente en ello en que nos centramos, aplicando esta energía escalar o radiante, para lograr la armonía y el equilibrio integral de las personas, mediante lo que llamamos: “equilibrio cuántico”

Las propiedades de la energía escalar son no lineales y no hertzianas Esta forma de energía tiene la capacidad para transportar información. Asimismo, no decae con el paso del tiempo o la distancia.

La Energía Escalar no puede ser medida por los instrumentos de frecuencia contemporánea, ya que la comprensión tradicional de la energía es que fluya en forma de ondas. Sin embargo, la Energía Escalar no irradia en forma de ondas sino que se expande hacia fuera en círculos de energía y  comprende un campo de sistemas de energía que está vivo, un campo de  energía vibrante y dinámica que irradia una red de  energías armoniosamente equilibradas.

Ahora sabemos, lo más sorprendente de todo, es que cada célula de nuestro cuerpo, en forma completa, tiene las mismas capacidades que tenemos en forma integral, y poseen memoria, inteligencia, sistema nervioso, capacidad de comunicarse, etc., pero más maravillosamente, tienen conciencia, lo que permite que, a través de la aplicación de la energía escalar podamos acceder a nuestra propia conciencia atraves de las de nuestras células, logrando así el cambio en la percepción de lo que llamamos realidad para conseguir así un bienestar integral general, el equilibrio cuántico.

La Ciencia Cuántica no trata enfermedades, trata a las personas activando las fuerzas de autorregulación, eliminando las toxinas y organismos patógenos, como virus, bacterias u hongos; la meta final es la auto-curación y no sólo la eliminación de los síntomas, como ocurre en otros tipos de terapias.

La terapia de equilibrio cuántico es una terapia del amor, porque se funda centralmente en la elevación de ese sentimiento en la persona sanada -a través de su conciencia, que es en donde se crea lo que llamamos “realidad”- y en el de quienes sirven de vehículo en ese proceso. Se basa en el supuesto de que el estado de amor incondicional implica físicamente un nivel vibratorio peculiar , en el que radica el más alto bien y la verdad más profunda del ser.